jueves, 23 de octubre de 2008

La humilde vida de la izquierda



Escribía ayer que nunca he cometido el pecado de ser de izquierdas pero debo confesar que más de una vez he tenido la tentación de pedir el carnet que me aseguraría una jubilación dorada.

Han sido momentos de debilidad al leer noticias como la del utilitario que se ha comprado el presidente de la Xunta valorado en 480.000 euros. O al conocer el tren de vida que llevan los titiriteros afectos al régimen con sus humildes mansiones, en la “Costa del Canon”, pagadas con los modestos ahorros de toda una vida de trabajo sacrificado a favor de los más necesitados. Por no hablar de la reforma del piso oficial (que no de protección oficial) de Bermejo o la cuarta “unidad habitacional” de la ministra De la Vogue.

Sin embargo, a fin de cuentas, para dormir con la conciencia tranquila me quedo con otro grupo de gente. No son tan fashion ni superguais pero son honestos y luchan, de verdad, por los desfavorecidos de nuestra sociedad:

Cáritas recibe hasta un 40 por ciento más de peticiones de ayuda

No es ninguna novedad que la crisis económica no sólo está golpeando a los más débiles, sino que está esbozando un nuevo tipo de pobreza que Cáritas concreta en familias con el padre en paro, familias jóvenes con niños pequeños o formadas por mujeres solas con personas a su cargo.

También aumenta la pobreza entre el sector de las mujeres mayores con pensiones no contributivas o mínimas que, cada día que pasa, cubren menos sus necesidades perentorias.

Cáritas es una ONG de la Iglesia, “entre sus objetivos fundacionales destacan la ayuda a la promoción humana y al desarrollo integral de la dignidad de todas las personas que se encuentran en situación de precariedad. En su trayectoria Cáritas asume un triple compromiso en su acción social: informar, denunciar y sensibilizar a la opinión pública sobre las situaciones de pobreza y vulnerabilidad, sus causas, consecuencias y la posibilidad de participación en el cambio”.

En estos tiempos en que las bolsas de todo el mundo se hunden, esta es la inversión más rentable, ganará mucha gente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Alfonso te he conocido a través de Pedro Mendiara, de vez en cuando me paso por tu blog...
Eso que dices pasa en Galicia, EN Andaucía, yal presidente del Palamento de Cataluña!(un A8), lo oí en el "gato al agua" a Aleix vidal Quadras.

Un atrevido y cordial saludo,LM.